Vive una EXPERIENCIA autentica , en armonía con la ruralidad y la vida campesina que ofrece: caminar 100 mts desde casa maloka hasta la quebrada,en un terreno con declive, de pasto y caminos empedrados. De casa maloka a casa chalet 30 metros y de allí hasta la cocina 20 metros y desde la cocina a la quebrada 50mts. Andar en bici por carretera destapa, USAR EL SANITARIO SECO ECOLOGICO, prender la estufa de leña, escuchar el canto al amanecer de las aves nativas es un lugar ideal para aislarse del agobio que producen las tecnologías; ahhh y por su puesto leer, ver una película, dormir o berber una cerveza en una hamaca es el otro pretexto! para dejarse llevar!!! QUEREMOS EL AGUA Y POR ELLO FLUYE para las plantas y los animales. Estancia Iraka es una finca ubicada en la vereda de pueblo viejo., a 2, 5 Kms de Ráquira tiene edificaciones construidas con bareque, adobe, madera y paja armonizan con la vegetación, el agua de la zona. LOS baños ubicados FUERA DE LAS HABITACIONES, tienen SANITARIOS SECOS ECOLOGICOS, que no necesitan agua y en cambio si permiten aprovechar los desechos solidos como abono y reducir el uso del agua. El concepto amazónico que sumado al campesino acentúa la vivencia de una cotidianidad para compartir ratos tranquilos, silenciosos en medio de espacios amplios, iluminados y abiertos. Las especies vivas que ocupan el lugar como los robles, sauces, alisos, arrayanes hablan de lo maravilloso de estar allí. Los libros que refieren la cultura muisca, cultura amazónica y la historia de la humanidad, son para gozarlos en medio de una hamaca. La casa maloka tiene un primer nivel en el que esta la chimenea y un altillo con dos camas. Cuenta con su baño . El espacio común es la cocina

Como anfitriones de IRAKA, disfrutamos mucho con los huéspedes al compartir un tinto o una aromática en la mañana, al brindarles un sitio que sencillamente provoca desconectarse de las rutinas urbanas para encontrar rutinas que les permiten aprender, divertirse y querer quedarse.

Los alrededores de IRAKA, como las fincas vecinas, la escuela, los caminos, las carreteras destapadas, hacen un ambiente despejado, silencioso y natural, acompañado del canto de los pájaros, el sonido del agua de la quebrada, los campesinos caminando y las grandes extensiones de arboles nativos. El pueblo Ráquira, sus barrios, muestran un paisaje un tanto citadino que es el complemento de lo rural. Para visitar: el patio de brujas. el laberinto. el monasterio museo de la candelaria.