Hoteles y casas que admiten mascotas en Toscana

Es el hotel con la decoración más bonita y original de los que he estado. Además, es muy cómodo, está muy bien situado y todo el personal ha sido agradable. Fuimos en coche y el parking es muy bueno y con muchas plazas. Y por último, lo mejor, ¡ADMITEN MASCOTAS! Nuestro perrito estuvo como en casa (le pusieron camita y cuencos). ¡Sin duda repetiríamos!

Solo estuvimos una noche. Muy cercano al aeropuerto de Pisa, llegas andando en un momento, el camino es seguro. La dueña es muy amable y atenta. Es un adosado con dos habitaciones para diferentes huéspedes, la nuestra era la de abajo, sencilla con un armario y baño dentro. Hay cocina con todo equipado, nos dejó cosas básicas de desayuno, muy escueto pero que nos salvaron la vida además en la reserva no iba incluido, ¡y hasta unas alpargatas de usar y tirar! Repetiría.

Las habitaciones son amplias y muy cuidadas. El personal es muy atento a las necesidades de los clientes y siempre muy amable y cordial. El desayuno es optimo, muy completo. El parking es amplio y hay punto de recarga para vehículos eléctricos. El hotel está muy bien situado, a escasos 20min andando de Piazza Santa Croce o Piazzale Michelangelo. El hotel acepta clientes con perros incluso de talla medio-grande; hay un pequeño parque con zona para perros a 50 metros del hotel.

El lugar, y la ambientación rural, con una sencilla y muy cuidada decoración. Muy bien la habitación, espaciosa con amplio cuarto de baño y gran cama. El desayuno resultó bastante completo con las opciones disponibles, en dulce y salado. Está a cinco minutos de Montalcino. Y, sobre todo, nos agasajó Margherita, la gata que recibe cariñosamente a todos los huéspedes. ¡Es la reina del lugar!

La villa dispone de todo para pasar unas vacaciones geniales. Se encuentra en un entorno precioso, las instalaciones són muy cómodas y dispone de todo tipo de detalles. La propietaria es muy amable y muy buena anfitriona y tienen dos perros y dos gatos que son un amor.

Ricardo es súper majo, nos adelantó el desayuno para poder salir más pronto un día que lo necesitamos y nos dió recomendaciones para las visitas cada día. La finca es una pasada, y el poni, los perros y los gatos, muy sociables.

Ubicación espectacular! en el centro de la Toscana, a poco rato de los pueblos más lindos. El lugar es maravilloso, paisajes de sueño, rodeado de olivos, naturaleza y unos amistosos animales de granja/mascotas. Pero por lejos lo más gratificante fue la atención de los dueños. Filippo y Santiago nos hicieron sentir como en casa y muy acogidos… tanto así, que a ratos olvidas que no estás en tu propia hacienda.

El alojamiento es precioso y tiene unas vistas estupendas. Gran tranquilidad ( no se admiten niños ni mascotas). Impecable la limpieza y el mantenimiento. El staff es encantador, ayuda cuando es preciso pero es muy discreto. Creo que no figuraba en la descripción, pero hay una lavandería a disposición de los clientes. No se incluye el desayuno, pero en la zona común hay cafetera y bolleria disponible todas las mañanas. La piscina bonita y muy cuidada. La propiedad tiene viñedos y una bodega, que se puede visitar.

El lugar era idílico. Los anfitriones super amistosos y nos hicieron sentir como en casa desde el primer momento. Su equipo nos proporcionó un montón de consejos interesantes que, sin duda, contribuyeron a hacer nuestro viaje aún más increible. El lugar es totalmente pet friendly. Los perros no solo son bienvenidos sino que se les permite andar por todo el recinto como un huesped más. Estuvimos muy cómodos y nos encantaría volver a visitarlos algún día.